La verdad muy agradables.
Por el idioma no te tienes que preocupar ya que te entienden perfectamente. Son muy atentos y correctos la comida riquísima y barata.
También estas bastante fresquito ya que disponen de ventiladores en la terraza.
Nuestro camarero fue Fabricio y ha sido un encanto.
Si estáis pir el trastero recomiendo 100×100 ir.