Le doy a este restaurante una A+++++. El personal es acogedor y atento, el ambiente era agradable y la comida era excelente. Creo que es la mejor comida que he comido en Roma. También aprecié la variedad de opciones. He notado que los otros restaurantes que hemos probado tenían el mismo menú básico de platos de pasta similares. Pude comer ternera que estaba tierna como un tenedor. ¡Tenía el Tartufo de chocolate que era delicioso!
Estoy de acuerdo en que el precio de la comida era muy razonable. Aprecié especialmente que nos sirvieran pan, sin que tuviéramos que pedir y no cobraran por ello. No agregaron un cargo por servicio.
Hemos cenado 7 personas en la terraza (con calefacción), varios platos de carne y unas pizzas. Estaba todo buenísimo, y nos han atendido de forma muy atenta y con un trato familiar. Teniendo en cuenta que está situado en una zona céntrica, la relación calidad-precio es estupenda.
Más que recomendable.