En nuestra última noche le preguntamos a una camarera de bar que era local cuál era el mejor restaurante de la ciudad.
Llegamos rápidamente y tuvimos suerte de estar sentados. El ambiente y el servicio era de primera clase al igual que la comida. Los precios también eran muy razonables. Durante unas semanas de vacaciones esto fue sin duda la mejor comida que tuvimos. Sin duda recomendaría.