Nos topamos con este bar de vinos en nuestra primera noche en Florencia. El tipo que dirige el lugar era muy amable y servicial, recomendó algunos vinos increíbles. ¡No podíamos creer lo barato que era el vino, con copas entre 3 y 5€! También pedí un € 5 aperol spritz aquí, que era genial también. Nos encantó el ambiente en el lugar, que se llenó de estudiantes locales hacia la noche, y por la noche la gente estaba saliendo a la calle afuera. El servicio era genial incluso en momentos ocupados.
Durante la noche, mi amigo y yo fuimos objeto de insultos homofóbicos y racistas por parte de un grupo de personas sentadas a nuestro lado. Los comentarios no solo fueron abiertamente discriminatorios, sino que cuando reaccionamos, la situación se intensificó con amenazas de muerte y amenazas de violencia contra mí.
Esta opinión es una invitación a los propietarios a prestar más atención a la seguridad y el respeto de todos los clientes para que el lugar pueda ser realmente un ambiente acogedor para todos. Espero que en el futuro se adopten medidas para evitar que vuelvan a ocurrir situaciones similares.
Entiendo que el personal no puede monitorear cada conversación entre clientes, pero creo que es importante prestar más atención a situaciones como esta en el futuro.