Lo único bueno de este lugar es la ubicación de la plaza Ercole. Fui a por bebidas y helado después de la cena. El costo de dos licores y tartufi era casi el mismo que nuestro encantador almuerzo en Little Italy. Supongo que con tantas malas críticas el dueño tiene que estafar a sus pocos clientes, pero esa no es una estrategia de negocio a largo plazo. Avoid.